La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible cuenta con 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Este documento fue aprobado por los dirigentes mundiales en septiembre de 2015 en una cumbre histórica de las Naciones Unidas.
La finalidad de la elaboración de la Agenda 2030 fue delinear objetivos de aplicación universal para que en los próximos 15 años, los países puedan redoblar sus esfuerzos y poner fin a la pobreza en todas sus formas, reducir la desigualdad y luchar contra el cambio climático.
Dichos objetivos presentan la singularidad de instar a todos los países, ya sean ricos, pobres o de ingresos medianos, a aplicar medidas para promover la prosperidad al tiempo que protegen el planeta.
Asimismo, las propuestas reconocen que las iniciativas para poner fin a la pobreza deben ir de la mano de estrategias que favorezcan el crecimiento económico y tengan en cuenta una serie de necesidades sociales, entre las que es importante señalar la educación, la salud, la protección social y las oportunidades de empleo, al mismo tiempo que la lucha contra el cambio climático y la protección del medio ambiente.
Entre algunos de los objetivos propuestos se encuentran:
Objetivo 1: fin de la pobreza
Los niveles de pobreza extrema han bajado a la mitad desde 1990. Si bien se trata de un logro notable, 1 de cada 5 personas de las regiones en desarrollo todavía vive con menos ingresos al día, y hay millones de personas que ganan poco, a lo que se suma que hay muchas de ellas en riesgo de recaer en la pobreza.
La pobreza va más allá de la falta de ingresos y recursos para promover estilos de vida sostenibles. Entre sus manifestaciones también están incluídos el hambre y la malnutrición, el acceso limitado a la educación y a otros servicios básicos.
Además, está más presente la discriminación, la exclusión social y la falta de participación en la adopción de decisiones.
Es por eso que el crecimiento económico debe ser inclusivo con el objetivo de generar empleos sostenibles y promover la igualdad.
Objetivo 2: hambre cero
Si se desarrollan buenas prácticas, la agricultura, la silvicultura y las piscifactorías pueden brindar comida nutritiva para todos y generar ingresos decentes, mientras se apoya el desarrollo de los productores del campo y la protección del medio ambiente.
De todos modos, los suelos, agua, océanos, bosques y la biodiversidad están siendo rápidamente degradados.
El cambio climático está poniendo mayor presión sobre los recursos de los que dependen las comunidades y aumentan los riesgos vinculados a desastres tales como sequías e inundaciones.
Ante este contexto, muchos productores ya no pueden ganarse la vida en sus tierras, lo que los obliga a emigrar a las ciudades en busca de otras oportunidades.
Es por eso que es necesario una profunda reforma del sistema mundial de agricultura y alimentación ya que estos sectores ofrecen soluciones claves para el desarrollo y son vitales para la eliminación del hambre y la pobreza.
Objetivo 3: salud y bienestar
Para lograr un desarrollo sostenible es esencial garantizar una vida saludable y promover el bienestar general.
En ese sentido, se han logrado grandes progresos en relación al aumento de la esperanza de vida y la reducción de algunas de las causas de muerte más comunes vinculadas a la mortalidad infantil y materna.
Además, se han obtenido importantes avances en cuanto al aumento del acceso al agua limpia y el saneamiento, la reducción de la malaria, la tuberculosis, la poliomielitis y la propagación del VIH/SIDA.
De todos modos, hay muchas iniciativas de mejoras pendientes para erradicar por completo una amplia gama de enfermedades y enfrentar numerosas y variadas cuestiones emergentes relativas a la salud.
Objetivo 4: educación de calidad
Tener un buen nivel educativo es la base para mejorar la vida de las personas así como para el desarrollo sostenible.
En este aspecto se ha logrado un avance en relación al acceso a la educación en todos los niveles y en las tasas de inscripción en las escuelas particularmente para mujeres y niñas.
La alfabetización básica ha aumentado notablemente, pero se necesitan mayores esfuerzos para alcanzar los objetivos de educación universal.
Objetivo 5: igualdad de género
Si bien se han producido avances a nivel mundial vinculados a la igualdad entre los géneros a través de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, las mujeres y las niñas siguen sufriendo discriminación y violencia en todos los lugares del mundo.
La igualdad entre los géneros no es solo un derecho humano, sino que es la base necesaria para conseguir un mundo pacífico, próspero y sostenible.
De este modo, si se facilita el acceso a la educación, la atención médica, un trabajo digno y una representación en los procesos de adopción de decisiones políticas y económicas, se impulsarán las economías sostenibles y se beneficiará a las sociedades y a la humanidad en su conjunto.
Estos son algunos de los objetivos propuestos en la Agenda 2030, relacionados a diferentes aspectos de la vida social de las comunidades pero bajo un objetivo general común que es el logro de un desarrollo sostenible.
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