Los vehículos no tripulados o simplemente drones pueden ser aéreos, terrestres o acuáticos. En cualquiera de los casos, estos equipos se encuentran en constante evolución y su aplicación se ha extendido a los diferentes campos del conocimiento humano, en las ciencias e ingenierías y especialmente, en la agricultura de precisión.
Dentro de la implementación de drones en la agricultura, se puede hacer una clasificación teniendo en cuenta diferentes perspectivas. En ese sentido, se pueden distinguir por el uso, por el tipo de control o por su forma.
- Por el uso se pueden encontrar:
-Drones militares, suelen ir armados y con capacidad de bombardeo, aunque otras veces son únicamente para vigilancia.
-Drones civiles, son aquellos que no tienen uso militar y a su vez pueden ser drones de uso comercial, utilizados para la venta de servicios como la fotogrametría, multimedia; drones para aficionados, para su uso como hobby; drones de uso gubernamental, para las fuerzas del estado, bomberos, rescate, entre otras.
- Por el tipo de control los drones pueden ser:
-Autónomo, ya que no necesita de un piloto humano que lo controle desde tierra. Se guía por sus propios sistemas y sensores integrados.
-Monitorizado: en este caso sí se necesita de un técnico humano. La labor de esta persona es brindar información y controlar el feedback del drone. El drone guía su propio plan de vuelo y el técnico, a pesar de no poder controlar los mandos directamente, sí puede decidir qué acción llevará a cabo.
Este sistema es habitual en labores de agricultura de precisión y fotogrametría.
-Supervisado, acá hay un operador que lo pilota, aunque puede realizar algunas tareas autónomamente.
-Preprogramado, es el equipo que sigue un plan de vuelo diseñado previamente y no hay forma de modificarlo para adaptarse a posibles cambios.
-Controlado remotamente (R/C), el drone es pilotado directamente por un técnico mediante una consola.
- En cuanto a su forma tenemos:
Multirrotores, son los más usados hoy en día. Se componen de varios motores independientes situados en los extremos del aparato. Se suelen clasificar según el número de motores en tricópteros (3), cuadricópteros (4), hexacópteros (6) y octocótperos (8).
Su uso es el más extendido debido a su gran estabilidad y la facilidad y cantidad de maniobras que pueden realizar, además de poder volar estáticamente en el lugar indicado. Su desventaja es el gran consumo de energía que necesitan para mantener el vuelo y su autonomía que suele estar entre los 15 y los 30 minutos. Estos equipos son ideales en el sector audiovisual y en la inspección industrial.
-Helicópteros, su forma es la de un helicóptero convencional pero de tamaño pequeño. Está compuesto de un solo motor principal y ello le otorga gran capacidad de carga y autonomía. Existen modelos de combustión interna que pueden volar durante una hora sin repostar.
De todos modos, su complejidad tanto a nivel mecánico como de control los ha hecho menos accesibles y son los menos utilizados. Ideales para fotogrametría, vigilancia o agricultura de precisión.
-Ala fija, son aquellos cuya fisonomía es similar a la de un aeroplano. Están compuestos por un cuerpo principal unido a dos alas que les permiten planear y un rotor en cola cuya propulsión puede ser eléctrica o de combustión.
Según expertos, es el más eficiente aerodinámicamente hablando y el que tiene mayor autonomía de vuelo. Por otro lado, presenta el inconveniente de que es el que menor carga puede llevar, tiene menos agilidad de maniobras ya que no puede permanecer inmóvil y necesita una gran superficie para despegar o aterrizar.
De todas maneras, su gran autonomía lo convierte en un candidato ideal para las labores de fotogrametría y agricultura de precisión.
Tecnología disponible para la agricultura
Actualmente, en el mercado internacional hay diversos tipos de drones para la agricultura.
Los más utilizados son el multirrotor-cuadricóptero, el cul tiene un tiempo de vuelo de 30 minutos y cobertura por vuelo de 65 ha; y el de ala fija con un tiempo de vuelo de 30 a 90 minutos y cobertura por vuelo de 120 a 3.800 ha.
Un aspecto importante son los sensores utilizados en cada equipo. No necesariamente han sido producidos y calibrados para la agricultura los sensores que capturan imágenes rojo-verde-azul (RGB) e infrarrojo cercano (NIR).
Es por eso que las fotografías que se toman deben venir geolocalizadas, de tal manera que puedan ser ubicadas exactamente para ser sobrepuestas y con ellas formar el mapa de la plantación.
Las cámaras de tipo agrícola tienen filtros especializados que las hacen más costosas. Ejemplos de cámaras especializadas para la agricultura son la Micasense Red-Edge y Parrot Sequoia. Estas cámaras son ligeras y están diseñadas específicamente para la potencia de los drones. Otro aspecto importante es la ubicación en el terreno: los drones tienen GPS incorporado que dan la localización en el vuelo.
En síntesis, estas son algunas de las principales características que tienen los drones agrícolas, una herramienta muy utilizada por los productores que buscan tomar decisiones más precisas y rentables para su producción.
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